La crisis del COVID-19 ha evidenciado la alta vulnerabilidad que los hogares informales enfrentan al contar con condiciones precarias como hacinamiento y falta de acceso a servicios de agua y saneamiento.
Esto está demostrando la importancia de invertir en infraestructura de vivienda que atienda a las poblaciones vulnerables, así como mecanismos y reformas que contribuyan a reducir los déficits de vivienda. la inversión en construcción tiene un efecto multiplicador en la economía, generando empleo indirecto y dinamiza otras industrias que forman parte de la cadena de producción. Así mismo, este sector emplea una alta proporción de la población no calificada y vulnerable socioeconómicamente que depende de los ingresos diarios, afectando a poblaciones que no cuentan con un “colchón económico” que les permita mantenerse por un tiempo prolongado.
Además de determinar protocolos y lineamientos que requieren medidas de distanciamiento social, limpieza y desinfección dentro de las obras, la experiencia internacional resalta la importancia de comunicar estos lineamientos a través de guías fáciles de entender, así como cursos de inducción a los trabajadores. Complementar las medidas dentro de la obra con medidas que promuevan la seguridad en el transporte público, realizar análisis de riesgos en los sitios de construcción y consensuar las medidas entre empresas, clientes y trabajadores también son fundamentales para la efectiva implementación. Tanto los protocolos como las medidas fiscales y financieras son necesarias para la reactivación del sector construcción.
Es clave tener en cuenta que toda medida de política pública debe ser adaptada y replicada considerando el contexto de cada país. Muchas de estas medidas están siendo efectivas a corto plazo y podrán contribuir a que las empresas y los proyectos que iban en marcha puedan sobrevivir a la crisis. Sin embargo, es necesario que los gobiernos también piensen en reformas del sector vivienda a mediano y largo plazo. Reformas que permitan incrementar el acceso a vivienda de calidad, especialmente dirigido a poblaciones vulnerables.
Fuente: lostiempos.com